Todos hemos escuchado acerca de la actividad física para tener buena salud, recomendaciones que se centran en la capacidad de los deportes para cuidar la salud cardiovascular. Sin embargo, para alcanzar el objetivo de prevenir el riesgo de enfermedad coronaria, se deben conocer y cumplir ciertos parámetros que harán la práctica deportiva además de eficiente, placentera, adaptándola a las exigencias personales.
Deporte y control de factores de riesgo cardiovascular
Siempre se ha dicho que la mejor estrategia es la prevención, y nada como el campo de la salud cardiovascular para cobrar mayor significado. Una de las principales acciones preventivas es la práctica deportiva, ya que además de mejorar los estados anímicos y de bienestar, está comprobado que evitan la aparición de enfermedades cardiovasculares.
Y no es necesario practicarlo hasta el agotamiento, se puede realizar deporte de intensidad moderada, lo importante es incluir en nuestra vida diaria una rutina de ejercicios, desechando el perjudicial sedentarismo.
Realizar algún deporte controla la aparición de factores de riesgo cardiovascular, como la obesidad, el hipercolesterolemia o la hipertensión arterial, además de ayudarnos a asumir hábitos de vida saludables, como una alimentación balanceada, y a eliminar otros perjudiciales como el tabaquismo.
¿Cómo el deporte ayuda al corazón?
El deporte y la actividad aeróbica, ayudan al corazón a mantenerse sano, activando su funcionamiento, así como el de los pulmones. Permitiendo un uso más eficiente del oxígeno transportado en la sangre. De esta manara la práctica deportiva regular protege el sistema circulatorio, al aumentar el flujo y volumen de sangre, además de regular la tensión en las arterias.
Por otra parte, estimula el funcionamiento de las capas internas de los vasos sanguíneos, llamadas endotelio, proceso clave en la salud cardíaca. Pudiendo además regular los niveles de glucosa en sangre.
Adicionalmente, la práctica deportiva logra:
- Reducir valores altos de colesterol LDL.
- Elevar valores de colesterol HDL o colesterol bueno.
- Controlar la ansiedad y el estrés.
- Eliminar calorías, propiciando adecuado peso corporal.
- Reducir valores de la hipertensión arterial.
- Prevenir la diabetes.
Los efectos beneficiosos del deporte en la prevención del riesgo cardiovascular, hacen que la práctica de la actividad física deba formar parte de las actividades rutinarias, adaptándola al estado físico, a los gustos particulares.
Hidratación, complemento básico al practicar deporte
Al practicar actividad física el organismo se activa, comienza a sudar y se pierden sales minerales y agua. Influyendo también en este proceso la resistencia física o adaptación al entrenamiento, el tipo de deporte, la intensidad y las condiciones del ambiente tales como viento, humedad y temperatura.
Factores que hacen necesario mantener la adecuada hidratación en los tres momentos claves de la actividad física: previa, durante y al finalizar.
Cualquier ejercicio así sea de intensidad moderada genera, edemas de la producción de sudor, procesos de consumo energético, haciendo necesaria la ingesta de cantidades adecuadas de agua, pudiendo estar enriquecida con un poco de sales minerales y azúcar, para estimular el adecuado funcionamiento de los músculos. Reposición hídrica especialmente recomendada en casos de prácticas prolongadas de más de 45 minutos de duración.
¿Cómo empezar la rutina deportiva para cuidar la salud cardiovascular?
Los especialistas aconsejan empezar la rutina deportiva para la salud cardiovascular de manera gradual, de manera que el corazón se adapte, trabajando un poco más en cada jornada.
Antes de iniciar la práctica deportiva, es imprescindible realizar por unos minutos ejercicios de estiramiento o con una breve caminata, para calentar los músculos y acondicionar el sistema circulatorio. Así como al culminar, tomar unos minutos para enfriarse para que el organismo vuelva a su estado normal de ritmo respiratorio y cardíaco.
Si se realiza activada aeróbica moderada, se recomienda practicarla diariamente por un lapso mínimo de 30 minutos. Mientras que, si el deporte escogido implica una actividad entre moderada e intensiva, realizarla tres veces semanales por 25 minutos. Adicionalmente incorporar una rutina de moderad a intensa, 2 veces a la semana, para fortalecer la capacidad muscular.
Resaltando que, para disminuir el colesterol y la hipertensión arterial, se debe practicar algún deporte o actividad aeróbica que implique una intensidad entre moderada a intensa como nadar, caminar, bailar, correr o montar bicicleta, por un tiempo mínimo de 40 minutos, con una frecuencia semanal de 4 días.
¿Qué deseo alcanzar al practicar deporte para la salud cardiovascular?
Es importante tener claro cuál aspecto de la condición física se requiere mejorar para reducir el riesgo de salud cardiovascular, ya que existen deportes adecuados para obtener los resultados esperados. Debiendo observar que:
- Si se tiene obesidad: el objetivo es quemar acumulaciones de grasa, por eso hay que enfocarse en movilizar los músculos, practicando golf, bicicleta o carrera, en cinco jornadas a la semana, iniciando con muy baja intensidad y de manera prolongada.
- Si se desea reducir la glucosa en sangre: realizar deporte aeróbico de intensidad alta.
- Si se desea disminuir el colesterol LDL: se debe practicar una actividad deportiva aeróbica con una intensidad ligera a moderada, con cinco sesiones semanales.
- Si deseo reducir la hipertensión arterial: practicar un deporte aeróbico con intensidad moderada, cinco días a la semana. Los resultados podrán comprobarse entre tres a cuatro meses.
Deportes recomendados para cuidar la salud cardiovascular
¿Qué deportes favorecen al corazón?
Seguidamente, indicamos cuales son los deportes recomendados para cuidar la salud cardiovascular y sus beneficios:
- Caminar: al andar con pasos ligeros se activa el bombeo cardíaco, la actividad sanguínea y pulmonar. Ayudando además a bajar el colesterol malo y la hipertensión. Como técnica se recomienda dar pasos largos con una marcha rítmica, continúa, mientras los brazos se deben mover acompasada y rápidamente. Pudiendo bajar y subir escaleras para completar la rutina. Un correcto sistema circulatorio ayudará a evitar la patología maligna del corazón.
- Nadar: con una actividad aeróbica moderada, es considerado uno de los deportes más completos. Actúa incrementando el caudal sanguíneo en las arterias coronarias, estimulando la irrigación miocárdica. Adicionalmente, activa los músculos de brazos, espalda y piernas. La práctica debes realizarla 2 veces a la semana, al menos por 30 minutos, combinando los diferentes estilos. Aquagym es una de las actividades físicas consejadas por todos los especialistas en cardiología.
- Bailar: otro ejercicio aeróbico completo que, al activar músculos de brazos y piernas, incide sobre la circulación sanguínea. Además, reduce el estrés y mejora la auto estima. La zumba está entre los ejercicios aeróbicos más completos.
- Correr: excelente para la salud cardiovascular, implica tanto actividad como esfuerzo intenso, que provoca una respiración rápida, así como incremento en la frecuencia cardíaca. Es ideal para personas de peso adecuado y con cierta experiencia. Debiendo evitarse por personas con lesiones de cadera o rodilla.
- Bicicleta: actividad de baja presión sobre las articulaciones. Es una actividad de tipo aeróbico de moderada a intensa, según la velocidad. Se aconseja hacer pedaleos de 60 rotaciones cada minuto, aumentando gradualmente hasta llegar a las 90 rotaciones/minuto.
Los deportes son nuestros aliados para cuidar la salud cardiovascular, proporcionando bienestar físico y mental, así como una perfecta ocasión para estar en contacto con amigos y la naturaleza.